Los apagones se deben claramente a un problema técnico, pero por supuesto sometido a caprichos políticos y corruptos de los gobiernos, ya que en el servicio eléctrico nacional se tienen muchos nódulos congestionados, el de la transmisión, generación y también la falta de capacidad de transformación, manifestó el presidente de la Federación de Colegios de Ingenieros Mecánicos y Eléctricos, Eduardo Llamas Esparza.
Asimismo, indicó el ingeniero que el discurso de Manuel Bartlett, director de la CFE, estuvo lleno de incongruencias, pues primero reconoció que hubo problemas de desabasto, pero por otro lado dijo que el sistema es uno de los más seguros que se tiene, “es como decir sí, pero no”.
Por lo anterior, consideró que no fueron las declaraciones más indicadas, aunque ha sido una característica de este sexenio de estar culpando a los gobiernos anteriores.
Cuestionó el hecho de que se requieran 80 mil watts y que solamente se cuenten con 50 mil, por lo que es más que evidente que se tiene una insuficiencia, ya que la falta de mantenimiento provoca dicha carencia, “ellos cuentan con estadísticas y ni con eso han podido tener estable el sistema eléctrico nacional”.
Llamas Esparza mencionó que lo que declaró el director de la CFE no coincide con los números y con los apagones que se han venido presentando, además es bastante grave que en la mañanera se haya dicho que el sistema nacional no entró en crisis y que tampoco hubo daños en comercios o en los domicilios, “por el amor de Dios, hubo apagones en toda la República”.
Subrayó que la CFE ya ha demostrado que no cuenta con más de 50 mil megawatts de reserva de generación y tuvieron seis años para poderle dar el mantenimiento necesario, por lo que la siguiente administración tendrá el reto para generar soluciones.