Directivos y socios de la empresa transportista Línea Express siguen con el santo de espaldas, pues primero les sacaron de ruta sus 86 camiones, luego con juicios y chicanas les impiden reanudar actividades y ahora son objeto de embargos con los que están perdiendo sus bienes.
“Cuando menos la mitad de los dueños de los camiones que fueron sacados del servicio han sido objeto de embargos por los acreedores que han mostrado poca empatía con el problema que se enfrenta luego de que se nos ha impedido volver a prestar el servicio de transporte urbano”, mencionó el representante de los empresarios que hace tres años fueron sacados del servicio por haberse negado a casi regalar sus unidades a la compañía a la que en condiciones ventajosas se le entregó el transporte urbano y suburbano por órdenes del entonces gobernador Martín Orozco.
Esta situación hizo crisis porque ahora los dueños de los primeros camiones chinos que entraron al servicio del transporte urbano están enfrentando juicios de embargo, asegurando que de hecho al menos la mitad de los socios de la empresa han tenido que rematar bienes familiares para cubrir los créditos que se contrataron para la compra de los camiones que luego fueron sacados a la mala de las rutas.
LLUVIA DE EMBARGOS
Representantes de los socios de Línea Express revelaron a HIDROCÁLIDO que “no nos la estamos acabando con quienes nos financiaron los camiones y los equipos que se nos exigieron para poder dar servicio, pues pese a que se tienen ya tres años con los autobuses sin trabajar y guardados, donde se están echando a perder, se han estado recibiendo presiones de todo tipo y de todos lados, para cubrir los pagos que se tienen pendientes de los créditos, lo que resulta ser un auténtico dolor de cabeza para los dueños de los autobuses y nuestras familias”.
Los camioneros afectados explicaron que lo más preocupante es el hecho que por el problema que hay en el Poder Judicial de la Federación, es que los juicios nomás no caminan, por lo que no se sabe hasta cuándo se podrá emitir una resolución firme sobre la serie de demandas presentadas contra los abusos en los que incurrió la autoridad que sacó del servicio a los camiones y que castigó a Línea Express con la inhabilitación.
CON EL AGUA AL CUELLO
Los camioneros denunciaron que por si no fuera suficiente con todo lo que se les ha dañado desde que se sacaron de ruta sus camiones, en castigo por no prestarse a los cochupos del ex-gobernador Orozco y de su operador Ricardo Serrano, ahora los acreedores se les han ido sobre sus bienes para tratar de recuperar los créditos otorgados para la compra y equipamiento de los camiones chinos a los que no se les está dando el uso debido.
“Cuando menos la mitad de los socios de Línea Express se han desprendido de algunos objetos de valor e incluso recurrido al empeño de terrenos o de sus casas con tal de cubrir las letras vencidas y los pagos que se les están exigiendo para no perder sus propiedades, por lo que es importante que las autoridades de gobierno tomen cartas en el asunto para salir del problema”, expusieron representantes de los camioneros afectados.