Familias y docentes de la Universidad Politécnica de Aguascalientes (UPA) alertaron sobre casos de dengue entre estudiantes, algunos en su forma grave o hemorrágica, causados por la proliferación de mosquitos provenientes del agua estancada en la fuente ubicada dentro del campus.
Los denunciantes afirmaron que no se trata de uno o dos casos aislados, sino de una serie de contagios registrados desde noviembre, sin que las autoridades de la universidad o del sector salud hayan intervenido oportunamente para erradicar los criaderos de mosquitos en la fuente ni para proteger a la comunidad educativa de estos insectos peligrosos.
Además, presentaron pruebas de estudiantes que padecieron dengue hemorrágico, algunos con síntomas graves que requirieron hospitalización y transfusiones de sangre para salvar sus vidas.
EXIGENCIA A LAS AUTORIDADES
Padres y maestros informaron al periódico HIDROCÁLIDO que, pese a notificar reiteradamente a las autoridades de la universidad sobre los criaderos de mosquitos y su presencia tanto en aulas como en otras áreas del plantel, las medidas tomadas han sido insuficientes. Aseguraron que también reportaron la situación a las autoridades de salud estatales y a la Jurisdicción Sanitaria, quienes apenas realizaron una nebulización superficial en jardines y la fuente, sin atender los salones de clase donde se concentran los mosquitos.
CASOS GRAVES DE DENGUE
Los padres señalaron que existen casos documentados ante la UPA de estudiantes que desarrollaron dengue hemorrágico tras ser picados por los mosquitos presentes en el campus. Sin embargo, afirman que la universidad no ha actuado de forma efectiva para eliminar el agua estancada de la fuente, que consideran el principal foco de riesgo.
Si bien se argumenta que las bajas temperaturas podrían frenar la reproducción de los mosquitos, los denunciantes enfatizan la necesidad de que las autoridades sanitarias tomen medidas inmediatas para evitar nuevos brotes entre alumnos, docentes y el personal de la institución.