CIUDAD DE MÉXICO, enero 20 (EL UNIVERSAL).- Este lunes 20 de enero se celebra el denominado “Blue Monday”, un día que ha sido identificado como el más triste del año. Sin embargo, no todo lo que acompaña a esta fecha tiene una connotación negativa. A lo largo de los años, han surgido diversas estrategias para mitigar la recaída emocional que muchas personas experimentan este día, un sentimiento que en ocasiones se ve acentuado por la cuesta de enero y el fin de las festividades navideñas. En el ámbito psicológico, el color “azul” ha sido tradicionalmente asociado con la tristeza.
La razón detrás de esta relación radica en que las tonalidades azules, especialmente las más oscuras, evocan emociones negativas, tales como el dolor emocional, la desesperanza o el sufrimiento.
El concepto del “Blue Monday” no tiene origen en un fenómeno científico, sino en una campaña publicitaria lanzada en 2005 por Cliff Arnall, quien diseñó una ecuación que, en teoría, determinaba que este lunes era el “día más triste del año”. De esta manera, nació la idea de un día destinado a poner en evidencia las emociones más sombrías, pero también de abrir un espacio para reflexionar sobre cómo enfrentarlas.
¿Qué es la tristeza?
La tristeza es una emoción primaria que, según la UNAM, juega un papel fundamental en nuestras vidas. Aunque se clasifica como negativa, la tristeza es una respuesta natural ante situaciones adversas.
Asimismo, esta fuente mencionó que este estado anímico provocado por eventos desfavorables, usualmente se manifiesta en forma de pesimismo, insatisfacción o incluso llanto.
¿Qué función tiene la tristeza?
Este estado emocional, que a menudo se presenta junto a sentimientos de soledad, apatía, melancolía y desánimo, tiene una función importante en la vida de los individuos. Según la Universidad Nacional Autónoma de México, la tristeza actúa como un mecanismo de reflexión que permite prestar atención a una situación emocionalmente significativa. Durante este proceso, las personas tienden a retraerse, aislándose para gestionar la emoción.
Es en este espacio donde se producen los pensamientos alternativos que facilitan la integración de la experiencia en la historia personal del individuo, lo que posteriormente lleva a una reorganización de sus comportamientos para adaptarse a una nueva realidad.
A pesar de los efectos negativos que el Blue Monday puede generar, especialistas sugieren que la mejor manera de contrarrestar la tristeza es mediante la risa. El humor no sólo aligera el ánimo, sino que también activa diversas funciones en el cuerpo, como la estimulación de órganos clave y el aumento del flujo de oxígeno al cerebro. Además, la risa desencadena la liberación de endorfinas, conocidas como las “hormonas de la felicidad”, que mejoran el estado de ánimo y facilitan la motivación para llevar a cabo las actividades cotidianas.
