El todavía fiscal estatal Jesús Figueroa Ortega, habría recurrido al tráfico de influencias y abuso de poder, al utilizar a la fiscalía como medio de intimidación, para favorecer en un negocio millonario a su sobrino, Aaron Elías Cruz Figueroa.
Su sobrino Aarón Elías, dijo al momento de realizar la operación fiscal contar con 37 años, ser empleado y vivir en una casa de interés social en Jardines de la Cruz.
De acuerdo con una investigación del periodista Rodolfo Franco, Aarón Elías participó como “inversionista” en el mes de julio de 2019 en la edificación de una Torre de departamentos tipo residencial, para lo cual donó una superficie de terreno de 847 metros cuadrados, mismo que se ubica en la calle Sierra del Laurel, en Bosques del Prado Norte.
El trato fue que a cambio de la donación, éste recibiría tres departamentos; uno con una extensión de 235 metros cuadrados y dos más de 76 metros cuadrados, con un valor total de poco más de 8 millones de pesos.
Así mismo se haría acreedor al pago de un millón 315 mil pesos, el pago por el terreno valuado en 811 mil 636 pesos, además de los intereses generados hasta el término de la venta.
Al presentarse la pandemia por Covid 19, la construcción del edificio se retrasó, sin embargo eso no impidió que Cruz Figueroa continuará recibiendo varios pagos por más de seis millones 402 mil pesos, hasta el último que obtuvo en septiembre de 2022, que fue cuando interpuso una demanda de tipo mercantil en contra de Alejandro N. N., representante legal de la empresa responsable del proyecto.
Ante la negativa de la Jueza del Segundo Juzgado Mercantil de hacer el embargo de 12 propiedades de Alejandro N.N., con un valor de 32 millones 800 mil pesos, por que no forman parte de los activos de la empresa, es que entra el fiscal Jesús Figueroa Ortega realizando visitas intimidatorias a las audiencias, acompañado por sus escoltas, donde incurrió en la práctica de tráfico de influencias, para meter presión sobre el embargo.
La directora del Registro Público de la Propiedad y del Comercio, notificó a la Jueza Segundo de lo Mercantil que los embargos eran inviables, por tratarse de bienes ajenos a los solicitados en la demanda, ya que son propiedad de otra persona moral.
Tras el fracaso de ambos de conseguir el embargo, el funcionario abrió dentro de la fiscalía, la carpeta de investigación CI/AGS/28772/10-24, por el delito de fraude contra Alejandro N. N., a quien mediante Ministerio Público impuso una restricción administrativa para bloquear los bienes, haciendo uso nuevamente se su tráfico de influencias.
A Alejandro N. N., se le entregó en su oficina un citatorio para para la celebración de una audiencia ante un Juez de Control Penal para el 10 de marzo; no obstante, junto a ese citatorio se le adjuntó otro documento en el que se le “reagendaba” la audiencia, curiosamente para hoy viernes 21 de febrero en punto de las doce horas.
Según los datos obtenidos por el periodista, la urgencia de fiscal por agotar sus “influencias”, tienen como fin vincular a proceso a Alejandro N. N., antes de que concluyan sus funciones, ya que derivado de ello, recibiría una tajada del dinero que su sobrino pretende obtener mediante dicho embargo.
De hecho, fue durante un careo con Alejandro N. N., frente a un Fedatario Público, que a Figueroa Ortega se le invitó para llegar a un acuerdo entre ambas partes, para lo cual se le ofrecieron bienes inmuebles, e incluso se dice que existe una constancia que comprueba que visitó la torre de departamentos, el jueves 20 de febrero.