Un examen de sangre podría convertirse en una herramienta eficaz y rápida para diagnosticar la enfermedad de Alzheimer, de acuerdo con un estudio liderado por investigadores del Brain Research Center BarcelonaBeta (BBRC), en colaboración con el Instituto de investigaciones del Hospital del Mar.
La investigación reveló que, a través de una muestra de sangre obtenida de pacientes con síntomas de deterioro cognitivo, es posible detectar la presencia del Alzheimer con una precisión del 90 por ciento, muy similar a los estudios actuales. Este avance, ya validado mediante diversas pruebas científicas, podría aplicarse próximamente de manera rutinaria en centros hospitalarios, facilitando el diagnóstico temprano de la enfermedad.

La eficacia es menor en aquellos pacientes que cuentan con una atención primaria, o en su defecto superan los 80 años de edad.
Otra de las ventajas que se sugiere esta herramienta de diagnóstico es la reducción considerable en el costo del estudio, ya que permite un ahorro de entre el 60 y 81 por ciento en relación con las pruebas actuales
Hasta ahora, el estudio se ha realizado en una cantidad limitada de pacientes solo con fines de investigación, pero se prevé que esta nueva técnica cambie significativamente el método diagnóstico actual, el cual consiste en la extracción de líquido cefalorraquídeo mediante una punción lumbar.
Este procedimiento, aunque efectivo en el 85% de los casos, es invasivo y puede generar molestias. En el 15% restante, cuando el resultado no es concluyente, se requiere repetir la prueba.
Los investigadores destacan que este nuevo método ofrece múltiples ventajas: es seguro, accesible, no invasivo y, sobre todo, fiable. Esto representa un avance crucial para pacientes en fases iniciales de la enfermedad, justo cuando comienzan los tratamientos farmacológicos.
“Este hecho nos puede permitir determinar qué personas se tienen que someter a otras pruebas, ya que permite detectar el Alzheimer en fases iniciales de forma muy precisa”, aseguró el investigador de la BBRC Marc Suárez- Calvet y médico adjunto del servicio de Neurología del Hospital del Mar con respecto al estudio.

Y agrega “hemos podido establecer dos puntos de corte, con los cuales podemos establecer este riesgo. Las personas que tienen niveles de biomarcador p-tau217 entre estos dos puntos de corte son las que tienen que pasar por nuevos test”
Primeros signos del Alzheimer y tratamiento médico actual
Síntomas iniciales del Alzheimer:
El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta principalmente la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Los primeros signos suelen ser sutiles, pero es crucial detectarlos a tiempo para iniciar el tratamiento lo antes posible. Entre los síntomas iniciales más comunes se encuentran:

- Pérdida de memoria reciente (olvidar fechas, eventos o conversaciones recientes).
- Dificultad para planificar o resolver problemas.
- Confusión con el tiempo o el lugar.
- Dificultad para completar tareas cotidianas.
- Problemas para encontrar palabras o seguir conversaciones.
- Desorientación espacial (perderse en lugares conocidos).
- Cambios en el juicio o toma de decisiones.
- Aislamiento social o pérdida de interés en actividades.
- Cambios de humor o comportamiento (ansiedad, irritabilidad o depresión).
Tratamiento médico actual:
Aunque no existe una cura para el Alzheimer, los tratamientos actuales buscan ralentizar el progreso de la enfermedad y mejorar la calidad de vida del paciente. Estos incluyen:
- Fármacos inhibidores de la colinesterasa: ayudan a mejorar la comunicación entre las neuronas y alivian algunos síntomas cognitivos.
- Memantina: regula la actividad del glutamato, un neurotransmisor relacionado con el aprendizaje y la memoria.
- Terapias biológicas recientes: algunos tratamientos más recientes, como los anticuerpos monoclonales, están diseñados para atacar directamente las placas de beta-amiloide en el cerebro, una de las características del Alzheimer.
- Atención integral: incluye apoyo psicológico, terapias cognitivas, entrenamiento de la memoria, ejercicio físico, dieta saludable y el acompañamiento familiar.
El diagnóstico temprano y un abordaje multidisciplinario son clave para manejar el Alzheimer de forma más efectiva y permitir a los pacientes y sus familias planificar adecuadamente su futuro.