Por Memo Leal
Una tarde apoteósica fue la que hoy dio en Pamplona, Guillermo Hermoso, el heredero del histórico Pablo, quien cortó el rabo de un extraordinario toro del maestro, y ahora ganadero, “Niño de la Capea”, igualando lo que el 11 de mayo pasado logró en el cierre de la Feria de San Marcos.
“Estuvo cumbre. Así con esa determinación, esa claridad para descifrar a sus toros, aprovechar las cualidades y ejecutar las suertes con perfección y dominio de sus cabalgaduras. Fue una actuación rotunda, así como la que vimos en Aguascalientes”, contó el almeriense Juan Fernández quien ha sido seguidor de los Hermoso de Mendoza en muchas plazas del mundo y que, inclusive, estuvo en Aguascalientes para ver a “Guiller”, como le llaman cariñosamente, cortar cuatro orejas y un rabo.
Hoy en el tradicional festejo de rejones, que antecede a las corridas y a los encierros de San Fermín, fue la primera vez que en su tierra el joven navarro actuó ya con su padre en el retiro.
A su primero le había cortado una oreja, pero al sexto “Veleto”, número 36 y que mereció la vuelta al ruedo por su nobleza y bravura, le realizó una faena emotiva, clavando siempre los adornos arriba y mostrando una magistral concatenación con sus caballos.
La plaza de Pamplona, de por sí ruidosa y fiestera, se volcó ante Guillermo Hermoso quien, con tres orejas y el rabo, salió en hombros y se convirtió en el primer triunfador de los sanfermines 2025.
Alternó con Roberto Armendáriz quien le cortó una oreja al cuarto y la debutante en esta plaza, Lea Vicens que en su primer toro en Pamplona dio una vuelta al ruedo.
El encierro formado por toros de “El Capea” y de la divisa de su esposa Carmen Lorenzo, fue muy bueno con cuatro toros bravos, nobles y de calidad, sobresaliendo desde luego ese sexto premiado con la vuelta al ruedo.



