La Secretaría de Salud Federal informó que, durante 2024, más de 100 mil niñas y adolescentes menores de 17 años se convirtieron en madres, según los registros de su base de datos sobre maternidad infantil.
De acuerdo con el informe, Chiapas fue el estado con mayor incidencia, al registrar 142.8 nacimientos por cada cien mil habitantes en menores de edad. Le siguió el Estado de México, que también presentó un alto índice de embarazos adolescentes. Otros estados con cifras elevadas fueron Guerrero, con 113.5 casos; Puebla, con 104.1 nacimientos; y Michoacán, con 99.2 nacimientos en menores de 17 años.
La Secretaría de Salud reconoció que la maternidad infantil representa un problema grave de salud pública, por lo que ha establecido objetivos concretos para erradicar esta problemática. Uno de ellos es la eliminación, para el año 2030, de los embarazos en niñas de entre 10 y 14 años, una meta que la dependencia reconoce aún está lejana.
Acciones para frenar la maternidad infantil
No obstante, en el marco de la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA), la Secretaría de Salud ha implementado diversas acciones interinstitucionales, tales como:

- Educación integral en sexualidad desde edades tempranas.
- Ampliación del acceso a servicios de salud sexual y reproductiva, con énfasis en métodos anticonceptivos.
- Campañas de concientización dirigidas a jóvenes, familias y comunidades sobre las consecuencias del embarazo temprano.
- Atención psicológica, médica y social para niñas y adolescentes embarazadas.
Además, se proyecta reducir en al menos un 50 por ciento los embarazos en adolescentes de entre 15 y 19 años para 2030, a través de programas preventivos y políticas públicas enfocadas en el respeto a los derechos sexuales y reproductivos de la población juvenil.



