En el año del Jubileo Ordinario Universal y al cumplirse 75 años del dogma de la Asunción de la Virgen María, miles de fieles participaron en la septuagésima Romería de la Asunción, una de las tradiciones más importantes para la comunidad católica de la entidad.
Desde las 20:00 horas inició el recorrido, pese a la amenaza de lluvia, encabezado por elementos de vialidad y grupos motociclistas. La Romería partió desde López Mateos y Josefa Ortiz de Domínguez, convocando a más de dos mil personas entre comparsas, grupos de danza, bandas de guerra y matlachines.
Como signo de apertura del Jubileo Ordinario Universal, un sacerdote hizo sonar el cuerno levítico, mientras el Obispo de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, levantó la cruz del Jubileo, bendijo a los presentes e inició el recorrido con el rezo de santo rosario.
Al llegar a la plaza, se dirigió hacia la Catedral Basílica y dirigió un momento de oración cerrar el rosario y posteriormente ocupo su lugar en el templete principal, al lado de las autoridades estatales: la gobernadora Tere Jiménez y el alcalde León Montañez, así como funcionarios y sacerdotes invitados.

Los 15 carros alegóricos que integraron el recorrido se dividieron en tres bloques con el tema general “María, madre de esperanza”, cada uno con escenas alusivas a la fe, al testimonio cristiano y a la figura de la Virgen María.
A lo largo de la caminata, marcharon numerosos grupos de apostolado de los diferentes decanatos de la Diócesis, congregaciones de religiosas, estudiantes con sus comparsas, bandas de guerra y estudiantinas y grupos de danza folclórica, que en todo momento contagiaron su fervor mariano, a través de expresiones como cánticos, oraciones, porras y bailes.
Carro triunfal y mensaje del Obispo, el cierre de le Romería
El carro triunfal con la imagen de la Santísima Virgen de la Asunción fue recibido con aplausos, rezos y vivas al llegar a la explanada.

Frente a la imagen, el obispo Juan Espinoza recordó al pueblo el origen del dogma de fe:
“La Inmaculada gran Madre de Dios, siempre Virgen María, cumplido el curso de su vida terrena, fue asunta en cuerpo y alma a la gloria celestial”.
Explicó que fue el Papa Pío XII quien, el 1° de noviembre de 1950, declaró de manera solemne el dogma de la Asunción a través de la constitución apostólica Munificentissimus Deus, confirmando esta verdad de fe para toda la Iglesia. Añadió que en 1955, la diócesis de Aguascalientes adoptó esta celebración con el primer quincenario mariano, y desde entonces, cada 15 de agosto, se honra a Nuestra Señora de Aguascalientes con peregrinaciones, danzas, cánticos y oraciones.

El obispo destacó que los fieles han realizado durante estos días “una sinfonía espiritual” que ofrece consuelo, esperanza y fortaleza, confiando en la intercesión de la Madre de Dios. Con esa palabras, solicitó a todos los presentes fijar su mirada en el cielo, pues fue un espectáculo de drones y fuegos artificiales, en medio de un ambiente de fe y unidad entre las familias asistentes, que se dio el cierre de la Romería de la Asunción.



