El senador morenista Gerardo Fernández Noroña concluyó su viaje a Medio Oriente, aunque generó polémica tras difundirse una fotografía en la que aparece junto a su asistente personal, Emiliano González, en una sala VIP del aeropuerto de Dubái.
La imagen contradice su “discurso de austeridad”, especialmente luego de que se confirmara que nunca estuvo en Gaza.
Noroña anunció en rueda de prensa que su viaje a Palestina sería “austero y humanitario”, y que estaba contemplado desde hace tiempo, aunque se pospuso por el alto al fuego y la crítica situación humanitaria derivada del bloqueo al pueblo palestino. Para ausentarse temporalmente, solicitó licencia al Senado de la República, con la intención de permanecer nueve días y regresar el 2 de noviembre; sin embargo, volvió dos días antes, tras ausentarse desde la noche del 22 de octubre.
El legislador explicó que el viaje fue cubierto por los Emiratos Árabes Unidos, como muestra de solidaridad hacia Palestina. Ante esto, la senadora de oposición del Partido Acción Nacional (PAN) Lilly Téllez, exigió transparencia sobre los recursos utilizados y pidió abrir una investigación para determinar si la invitación cumplió con las normativas legales y conocer quién financió realmente el viaje. Por su parte, el senador Adán Augusto López Hernández defendió la “hermandad” que tiene hacia Noroña sosteniendo que los viajes financiados por gobiernos extranjeros son una práctica diplomática aceptada.
Fernández Noroña vuelve a mostrar incongruencias entre su discurso y sus acciones, aunque seguramente calificará estas críticas como parte de una campaña en su contra.
Avión millonario
No es el primer viaje polémico que realiza este año. A principios de octubre viajó en un avión privado, un Socata TBM850 con matrícula estadounidense N850KL, uno de los más lujosos y prestigiosos, presuntamente para informar sobre su trabajo en Piedras Negras, Coahuila, a un costo aproximado de 2 mil dólares por hora. Aunque explicó que prefiere vuelos comerciales por comodidad, con cinismo aseguró que continuará usando el taxi aéreo cuando sea necesario.
Mansión en Tepoztlán
En agosto, Fernández Noroña generó controversia tras revelarse detalles sobre una mansión de su propiedad ubicada en Tepoztlán, Morelos, valuada en 12 millones de pesos. La residencia cuenta con amplios jardines de 1,200 metros cuadrados, además de múltiples áreas al aire libre y una zona montañosa donde está construida. Esta propiedad ha sido centro de debate por irregularidades en el registro catastral, ya que el terreno está inscrito sobre bienes comunales, lo que provocó un juicio de restitución promovido por comuneros del lugar. Además, varios manifestantes denunciaron haber recibido amenazas en este contexto.
La casa, que lleva por nombre “La Casa del Silencio,” ha sido motivo de cuestionamientos en cuanto a su legalidad y la coherencia con la política de austeridad que defiende el senador. Asimismo, Fernández Noroña denunció en redes sociales un allanamiento a la propiedad durante su ausencia, aumentando la polémica en torno a esta lujosa vivienda.
Su viaje a Italia
Otro de sus viajes más recientes fue en marzo, cuando Fernández Noroña viajó a Estrasburgo, Francia, para participar en un encuentro con los 46 presidentes de parlamentos europeos. Como presidente de la Mesa Directiva del Senado, representó a México en esta conferencia parlamentaria. El senador viajó en primera clase, con un costo aproximado de 133 mil pesos solo en el vuelo, sin incluir viáticos de comida y hospedaje. Este evento fue un foro importante para dialogar sobre temas internacionales y fortalecer relaciones parlamentarias entre diversas naciones europeas y México.
Aunque justificó que el viaje fue pagado, no por el Senado, sino por su propio bolsillo, esta elección de viajar en primera clase generó polémica pública por la aparente contradicción con su discurso de austeridad.



