La medida afecta directamente a repartidores, empresas digitales y usuarios que contraten envíos o comida por aplicación.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avaló el cobro de impuestos del 2% a los ingresos de todas las plataformas de entrega que operan en la Ciudad de México. Afecta tanto a las aplicaciones de comida como a las de mensajería y paquetería.
El cobro se aplicará sobre los ingresos de las plataformas, pero la SCJN autorizó que el costo se pueda trasladar al cliente, al restaurante o a los repartidores, a través de tarifas de servicios más caras. Esto generará aumentos en cada entrega que se realiza dentro de la Ciudad de México, afectando los pedidos diarios de miles de personas.
¿A quién afecta el impuesto del 2%?
Este impuesto del 2% se cobra a las empresas propietarias de las aplicaciones de reparto como Uber Eats, Rappi, Didi Food, entre otros, por el uso de la infraestructura vial de la ciudad.
Asimismo, se verán afectados los servicios de mensajería y paquetería, las plataformas digitales que intermedian entregas a través del modelo gig, los repartidores que dependen de estas aplicaciones y los consumidores que recurren a estos servicios.
Quienes se podrían ver exentos de estos impuestos son las empresas pequeñas o de autoempleo. Todo dependerá de su forma de facturar y las regulaciones de su municipio.
Repartidores y usuarios, los más afectados
Con la implementación de este impuesto, la Ciudad de México busca regular el modelo económico digital de las plataformas, incorporándolo como una fuente de ingresos fiscales.
Sin embargo, la medida ya ha generado molestias entre los trabajadores de estas plataformas y los clientes frecuentes. Los trabajadores aseguran que esta nueva medida reduce aún más sus bajos ingresos, dado que trabajan con márgenes mínimos.
Inflación en los alimentos
Este impuesto se suma a los aumentos generados por la inflación en el costo de los alimentos. En 2025, los precios de la canasta básica alimentaria en zonas urbanas de México han experimentado aumentos anuales cercanos al 4.7% debido a la inflación general.
¿Ahora qué sigue?
- Los usuarios notarán la aplicación de este impuesto en el costo de sus pedidos. En el desglose del pago deberá aparecer el cargo del 2%.
- Las plataformas deberán actualizar su facturación, así como avisar a sus repartidores y clientes del incremento de los costos y aclarar si ellos cubrirán el gasto o lo trasladarán de manera automática.
- Los repartidores tendrán que evaluar sus comisiones y pagos por cada servicio realizado.



