Días después del secuestro y posterior liberación del alcalde Jaime Cruz y su familia, así como de la ausencia de un Comisario de Seguridad municipal tras la renuncia del mismo, un impresionante dispositivo de seguridad ocurrió el pasado miércoles en Villa Hidalgo, Jalisco, donde efectivos de la Policía Estatal tomaron el control de las entradas y salidas de la referida localidad vecina de nuestro estado, Aguascalientes.
Tal como se informó en JLMNoticias, el operativo estuvo relacionado con los recientes acontecimientos que involucraron al presidente municipal, a su esposa Brenda Montañez, y su hijo Sebastián Cruz, quienes fueron privados de la libertad, en diferentes hechos, por el Cártel Jalisco Nueva Generación.
La incursión de los agentes de seguridad contó con la participación de al menos 200 efectivos de las Fuerzas Especiales de Operaciones Estratégicas de Protección (FOEP) en el referido municipio para reforzar las labores. Empleó, además, efectivos de Tránsito, equipo de drones y el Grupo de élite Unidad Central Operativa Especializada en Explosivos (TEDAX-NRBQ), según confirmó la Secretaría de Seguridad del Estado de Jalisco.
Detalló, además, que lo hizo junto con fuerzas federales, con elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, con quienes recorrió la cabecera municipal, así como los límites de dicha localidad con Aguascalientes y Zacatecas.
La suma de las corporaciones provocó un momento de tensión entre ellas. Un grupo de militares se acercó a los estatales cuando realizaban un operativo dentro de un predio.
Según recoge el medio local Dominio Público, las fuerzas federales cuestionaron a los estatales sobre su operar y pidieron ver las órdenes de cateo que justificarían la incursión en dicho predio, razón que hizo que los estatales se retiraran inmediatamente. Dicho medio compartió un video del momento en el que policías estatales salieron cuando fueron cuestionados por agentes de la Defensa y de la Guardia Nacional.
En las imágenes, se observa que, tras un diálogo breve, un estatal camina hacia una patrulla localizada a la mitad del predio. Indicó algo, mientras los agentes esperaban una respuesta. Tras ello, el agente que se aproximó a la patrulla subió y arrancó de inmediato la unidad. Ante la sorpresa, los federales corrieron tras ellos. Después, la patrulla se detiene para subir a otros policías y continúan su marcha. El resto de las unidades estatales, que estaban a unos metros, también maniobraron para retirarse.
Este megadespliegue se dio, también, en el marco de la reincorporación a sus labores del alcalde Cruz Villalpando, quien ya despacha desde su oficina, pero bajo un muy fuerte resguardo de seguridad por parte de elementos armados de la Policía Estatal.
El sábado pasado fue secuestrada Brenda Montañez, esposa del alcalde de Villa Hidalgo, afuera de Ruscello, fraccionamiento frente al Tecnológico de Monterrey en Jesús María, Aguascalientes. Sujetos armados, integrantes de una célula del Cártel Nueva Generación, la privaron de la libertad junto con un menor de edad. Ambos fueron liberados en la madrugada del lunes 10 de febrero, confirmó el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, hecho que la Fiscalía de Aguascalientes precisara posteriormente que ocurrió en la localidad de Jalpa, del lado de Zacatecas.
Tras su liberación, Montañez Saucedo aseguró, en entrevista con José Luis Morales, que el Cártel Jalisco exigió la destitución del secretario de seguridad de Villa Hidalgo. Debido a que el su esposo no atendió la exigencia, ella fue secuestrada.
A ese plagio precedieron los ocurridos el 5 de febrero, cuando Jaime Cruz Villalpando, juntos a dos trabajadores del Ayuntamiento, fueron plagiados por el mismo grupo criminal, aunque fueron liberados horas después. Y, días antes, Sebastián Cruz, hijo del edil, también fue secuestrado.



