Los casos de deshidratación a causa del calor están a la orden del día entre la población de Aguascalientes, afectando sobre todo a la población infantil y juvenil (5 a 14 años) y a los mayores de 40 años que suman más casos; por fortuna la Entidad mantiene saldo blanco en muertes atribuibles a los efectos de las temperaturas extremas que prevalecen en esta temporada.
De sólo un caso de deshidratación que se tenía reportado, en las últimas tres semanas la cifra se disparó a los 29, todos ellos por fortuna ambulatorios, es decir sin mayores complicaciones, además de que se mantiene en 5 el número de personas atendidas en el hospital por golpe de calor, según el reporte oficial de la Dirección de Inteligencia en Salud del ISSEA a cargo de la doctora Marie Salas Valenzuela.
Es evidente que los estragos de la temperatura elevada van más allá de los 5 casos de golpe de calor y los 29 de deshidratación que se han reportado, toda vez que los problemas diarreicos también se han disparado por los efectos del calor en los alimentos y por la falta de higiene al momento de consumirlos, además de que las insolaciones se están reproduciendo entre las personas que permanecen por períodos prolongados bajo los intensos rayos solares.
La distribución de los 29 casos de deshidratación notificados en lo que va de la temporada está de la siguiente manera: 2 en menores de 1 a 4 años de edad, 4 en niños de 4 a 9 años; 3 en menores de 10 a 14 años; 1 caso en un adolescente de 15 a 19 años; 4 más en personas de 20 a 24 años; 2 en adultos de 25 a 29 años; 2 en personas de 30 a 34 años y 3 más en personas de 35 a 39 años.
En la lista también aparecen 5 casos de deshidratación en personas de 40 a 45 años y otros 5 en personas de 45 a 49 años, mientras que entre personas de 50 a 54 años sólo hay dos casos y el restante corresponde a una persona cuya edad va de los 60 a 64 años.
En el reporte del ISSEA se destaca que excepto los 5 casos de golpe de calor que llevaron a las víctimas a recibir atención en el hospital, la totalidad de los casos de deshidratación han sido tratados de manera ambulatoria, es decir con consulta y seguimiento médico, sin que por fortuna ninguno de ellos haya presentado complicaciones.