Sara Montenegro, quien reside en Tecate, Baja California, llamó por tercera ocasión a la Megafarmacia del Bienestar para que le puedan surtir Alprazolam, un medicamento controlado y que le fue recetado en el mes de abril.
Sin embargo, el operador no pudo resolver su situación con el argumento de que “el medicamento no está en compendio”, por lo que tiene que ser el Instituto quien debe darle el fármaco, “es cuestión de ellos, no estamos autorizados para hacer el registro”.
Ante dicha respuesta, la señora Montenegro cuestionó: “¿Me puede decir para qué sirve la Megafarmacia?, tengo desde el 23 de abril solicitando el medicamento, yo pensé que esto iba a funcionar, estamos viendo que no sirve, quedaron de hablarme y ni eso pueden hacer”, dijo la paciente con cáncer.
La receta fue expedida el pasado 23 de abril con el número de folio: 02050724939450H por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con Alprazolam, un medicamento controlado.
La señora Sara llamó la semana pasada para solicitar el fármaco, el operador telefónico indicó a la paciente que le regresaría la llamada, pero no sucedió.
Asimismo, para Montenegro el adquirir el medicamento requiere desplazarse a Tijuana y el costo del traslado oscila entre los 300 pesos.
Al finalizar la llamada la señora Sara expresó: “dijeron que todos los medicamentos estarían ahí, no batallaría uno, yo pensé que eso iba a funcionar, elogia mucho el presidente la Megafarmacia, estamos viendo claro que no sirve”.