Por los precios que manejan las funerarias y clínicas, resulta mucho más caro morirse que nacer, pues los servicios mortuorios van de los 15 mil y hasta los 100 mil pesos o más, mientras que el costo de un parto en una unidad especializada no sobrepasa los 45 mil pesos.
A propósito del Día de Muertos que se celebra este sábado 2 de noviembre, HIDROCÁLIDO consultó costos de los servicios funerarios y se encontró que los precios son de auténtico infarto, sobre todo para las familias de bajos recursos, por lo que en muchos casos se llegan a endeudar al solicitar el servicio a crédito y con el pago de intereses y en otros hasta a deshacerse de sus bienes para poder darle la despedida al familiar fallecido “cuando menos se esperaba y sin estar preparados para hacerle frente a un compromiso de este tipo”.
Empresarios del sector indicaron que después de la pandemia del Covid-19 se incrementaron los precios de ataúdes y del servicio integral, pero después de ese período ya no se han movido los costos de los servicios funerarios pese a que los proveedores de los insumos utilizados para los ceremoniales no dejan de encarecer las cajas de muertos, los cirios y todo lo demás que se utiliza en un funeral.
COSTOS FUNERARIOS DE MIEDO
En las pequeñas funerarias ubicadas sobre todo en comunidades alejadas de la ciudad o en los municipios del interior los precios varían de manera importante, pues así como hay paquetes económicos de 14 mil o 15 mil pesos o el más demandado que oscila entre los 23 mil y los 27 mil pesos, también hay funerales que superan los 50 mil pesos, “todo depende de la caja que se seleccione y de lo que se requiera para el funeral”, en cuyos casos en muchas de las ocasiones se contratan los servicios con facilidades de pago o “en abonos, con tal de que los deudos saquen el compromiso de darle una despedida digna a su difunto”.
En las agencias funerarias de la ciudad también hay una competencia fuerte por el mercado y por ende, en los precios por el servicio, aunque los costos más fuertes se manejan en las funerarias “de moda o que venden lujos y no el servicio como tal”, por lo que en estos casos el precio de un funeral “digno” llega a los 80 mil pesos o incluso puede rebasar los 100 mil pesos, todo depende del servicio que se contrate, pues así como hay ataúdes económicos o de combate, también los hay especiales de pino, cedro o de algún material costoso.
DESPEDIR A UN SER QUERIDO ES MUY CARO
Los gastos para despedir a un ser querido fallecido no se limitan a los costos del servicio funerario que se contrate en función de la economía que se tenga en ese momento, sino que también se debe comprar o contratar al momento algún espacio en un cementerio para la sepultura o bien por la cremación y la compra de un nicho sea en el panteón o en alguna parroquia, esto en caso de que no se cuente con propiedad para tal fin, por lo que, como dicen los mismos dueños y empleados de las agencias fúnebres, “morirse cuesta un ojo de la cara… pero para los deudos, porque quien muere se va tranquilo y sin preocuparse en lo más mínimo por lo que cueste su despedida terrenal”.