Un alto número de personas con SIDA desconocen su situación y por lo tanto no se tratan, pues se estima que en México sólo 7 de cada 10 personas que viven con VIH saben de su condición y reciben tratamiento para contener el avance de esa enfermedad que continúa sin cura.
En el marco del Día Mundial contra el SIDA y luego de revelar que del 2010 al 2021 se incrementó en México de 230 mil a 360 mil el número de personas que vivían con esa enfermedad, activistas indicaron que otro de los problemas delicados que siguen padeciendo las personas infectadas de VIH/SIDA es el estigma y discriminación que los aleja de las alternativas que se ofrecen para frenar la evolución descontrolada del problema.
Ante ello, es importante que las instituciones del Sector Salud y las organizaciones sociales refuercen la estrategia de prevención y contención del SIDA, debido al subregistro que hay de ese padecimiento sobre el que se han encontrado importantes paliativos que permiten mejorar la salud y la calidad de vida de las personas infectadas.
PREVALECE EL ESTIGMA
Médicos y grupos comunitarios que realizan labor en apoyo a los infectados, resaltaron la necesidad de fortalecer las acciones que permitan incrementar el diagnóstico temprano del VIH, para con ello complementar los avances logrados, en virtud de que el estigma y la discriminación aún representan desafíos para el diagnóstico de la enfermedad y la subsecuente vinculación al tratamiento antirretroviral, disponible de manera universal.
Esta labor debe ir más allá con la suma de esfuerzos entre las instituciones públicas, las organizaciones comunitarias y los organismos nacionales e internacionales, pues de esa manera se estarían multiplicando las acciones de orientación, prevención y apoyo a las personas con SIDA.
SIGUE ALTA LA INCIDENCIA
De acuerdo a directivos de la organización México Vivo, se estima que en México sólo 7 de cada 10 personas que viven con VIH conocen su diagnóstico, lo que les permite tener acceso a los tratamientos para seguir con salud y bienestar; por ello, en México, cada año se avanza para acercarnos a la meta de ONUSIDA, cuyo lema en este 2024 ha sido “Sigamos el camino de los derechos”, para que todas las personas, independientemente de cualquier condición, tengan acceso a la calidad de vida que aportan los tratamientos de última generación que controlan el virus en 1 a 2 meses y que hoy están disponibles de manera universal en las instituciones públicas del sector salud.