“La salud es prevención, no la des por hecha. Lávate las manos, cuídate”, es el mensaje de la doctora Jared Barba, especialista en salud del ISSEA, quien hizo un llamado a no bajar la guardia ante la constante presencia de enfermedades, y a retomar hábitos básicos de higiene que fueron clave durante la pandemia, como fue el lavado de manos.

Barba destacó que el lavado frecuente de manos sigue siendo una de las acciones más simples y efectivas para prevenir enfermedades infecciosas. Recomendó realizarlo de forma constante: antes y después de comer, antes y después de ir al baño, y cada vez que salgamos y regresemos de la calle. “Es preciso realizar el lavado de manos de manera constante. No nos expongamos, no pongamos al límite nuestro cuerpo, hay que hacerlo de manera segura”, enfatizó.
Recordó que durante la pandemia muchas vidas se salvaron gracias a que la población atendió las recomendaciones del sector salud, como el lavado de manos, el uso de gel antibacterial, el uso de cubrebocas y la sanitización de superficies. Estas medidas ayudaron a contener la propagación de virus y evitaron que llegaran a los hogares, especialmente en aquellos donde los integrantes no podían permanecer en resguardo.
Además del lavado de manos, la especialista subrayó la importancia del correcto lavado de alimentos como otra práctica que no debe descuidarse. Aseveró que mantener frutas, verduras y utensilios limpios ayuda a prevenir enfermedades gastrointestinales y otras infecciones comunes. Las medidas de higiene no solo se limitan a las manos; también incluyen el manejo adecuado de los alimentos y mantener espacios libres de microorganismos, señaló.

Barba explicó que, aunque la emergencia por COVID-19 ha disminuido considerablemente, aún hay riesgo de enfermedades respiratorias como influenza, así como padecimientos crónicos que siguen en aumento, como hipertensión, obesidad, diabetes e insuficiencia renal, que como es bien sabido, cobra miles de vidas al año.
En ese sentido, hizo un llamado a retomar la cultura de la prevención, que poco a poco se ha ido perdiendo.
Finalmente, insistió en que el cuidado de la salud comienza en casa, con medidas tan sencillas como lavarse las manos y los alimentos, acciones que, aunque pequeñas, tienen un impacto enorme en la prevención de enfermedades y en la construcción de una vida saludable.



