La estimación de crecimiento de la economía de México en 2024 será menor a lo estimado hace unos meses, ya que se espera que alcance 2.2%, en lugar del 2.5% que pronosticó la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) en febrero pasado.
El organismo explicó que la economía mexicana registrará una desaceleración, ya que el pronóstico para 2025 es que crezca 2%.
En Perspectivas Económicas de la OCDE 2024, la Organización aseguró que “la solidez del mercado laboral reforzará el consumo. La inversión se verá respaldada por los proyectos de infraestructura pública en 2024 y por la deslocalización gradual de actividades manufactureras a México”.
Explicó que “las exportaciones sostendrán el crecimiento en 2025, tras perder algo de dinamismo en 2024 por la ralentización registrada en Estados Unidos. La inflación seguirá descendiendo poco a poco hasta el 3.1% en 2025”.
Sin embargo, las perspectivas inflacionarias son inciertas, porque el indicador “puede ser más persistente de lo previsto, sobre todo en los servicios. Las tensiones financieras registradas a nivel mundial pueden desencadenar una mayor aversión al riesgo e incrementar los costos de financiación y la volatilidad en los mercados de divisas”.
La OCDE añadió que mientras la industria minera y los servicios públicos registran una disminución de su actividad, hay un aumento en la construcción no residencial.
En tanto que las zonas industriales de los estados fronterizos del Norte “están prácticamente a plena capacidad”, aumenta la construcción de parques industriales y suben los precios de alquiler de almacenes.
Se observa también un incremento del empleo formal, aunque a menor ritmo que en 2023 y la tasa de informalidad bajó a 55%.
Sugerencias de la OCDE para México
Por otra parte, la OCDE comentó que la política monetaria debe suavizarse progresivamente, pero sin descuidar el objetivo de lograr que la inflación baje. Aunque el Banco de México ya tiene la tasa de interés en 11%, “se asume que la tasa de interés oficial se reducirá gradualmente hasta el 7.5% a finales de 2025”.
“La puesta en marcha de un plan fiscal plurianual ayudaría a mantener la prudencia presupuestaria y aportaría cierto margen fiscal para aumentar el gasto destinado a impulsar la productividad”, expuso.
Otra de las sugerencias de la Organización es el implementar un sistema integral de educación de primera infancia que considere el cuidado infantil y el servicio de atención formal a la tercera edad, para lograr que las mujeres participen más en el mercado laboral.
Se estima que el déficit fiscal en el 2024 llegará a 5%, según lo dicho por el gobierno federal, lo que es resultado de que aumentaron “las asignaciones presupuestarias a gastos sociales sobre todo a las pensiones universales no contributivas? y a proyectos emblemáticos de infraestructuras en el sur del país, al tiempo que han aumentado los costos de endeudamiento”.
Aunque se espera que el déficit público baje a 2.5% en 2025 porque se reducirá la inversión pública al concluirse los proyectos de infraestructuras del sur del país.
La OCDE recomendó al gobierno ser más eficiente con el gasto público, para lo cual pidió analizar costo-beneficio del destino de los recursos e incrementar los ingresos tributarios ampliando la base del Impuesto Sobre la Renta de las personas físicas, así como recaudar más vía impuestos sobre bienes inmuebles y luchar contra la evasión fiscal para invertir más en educación, infraestructura digital y luchar contra el cambio climático.