Desde las profundidades, la discreción y las sombras, Nemesio “El Mencho” Oseguera es considerado el capo de la droga más poderoso y buscado en México y Estados Unidos.
La recompensa que el país norteamericano ofrece por información o datos que lleven a su captura y sentencia, oscilan los 15 millones de dólares.

Sin embargo es un secreto a voces que pese a que en múltiples ocasiones han dado por muerto al Mencho, lo cierto es que se dice continúa vivo y escondido entre las sombras, liderando de manera estratégica el Cártel Jalisco Nueva Generación, considerado el de mayor poder y presencia en México, después del debilitamiento del Cártel de Sinaloa a raíz de la detención y extradición a E.U. de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Al ser uno de los criminales más buscados por ambos países, a sabiendas que cuentan con los sistemas de inteligencia más avanzados, existe la duda razonable del por qué a la fecha no se conoce rastro alguno y por qué motivo no se encuentra tras las rejas.
Luego de asumir la presidencia de Estados Unidos, una de las acciones que Donald Trump inició, es responder con una presión arancelaria, ante la inacción que México y Canadá han tenido para el tráfico de fentanilo hacia suelo americano.
El tráfico de esta droga letal se atribuye en gran medida al Cártel Jalisco Nueva Generación y a su líder “El Mencho”, uno de los principales distribuidores en los estados fronterizos, que lo ha puesto en la mira de E.U. y ser catalogado como organización terrorista junto con otros cárteles mexicanos.
En febrero pasado, México entregó un total de 29 capos de la droga, entre ellos Rafael Caro Quintero, “El chango” Méndez y un hermano de Nemesio, Antonio Oseguera Cervantes, para su enjuiciamiento.
Orígenes de el Mencho
Nemesio Rubén Oseguera Cervantes, nació el 17 de julio de 1966 en la comunidad de Naranjo de Chila en Michoacán, dentro de una familia pobre dedicada al campo, integrada por sus padres y sus cinco hermanos: Juan, Miguel, Antonio, Marín y Abraham.
Para integrarse a las labores del campo con su familia, Nemesio declinó a la escuela en quinto grado y ya con 14 años se inició como vigilante de plantíos de amapolas.
En la década de los ochenta, emigró de manera ilegal hacia California, Estados Unidos junto con su familia.
El San Francisco fue arrestado a los 19 años por el delito de propiedad robada y portación de arma cargada. de acuerdo con los registros, el Mencho habría cruzado en varias ocasiones la frontera entre Estado Unidos y México a finales de 1980 utilizando diferentes alias como “Rubén Ávila”, “José López Prieto”, “Miguel Valadez” entre otros más.
En su retorno a tierras mexicanas se había enfilado en la policía de un municipio Jalisciense, sin embargo decidió involucrarse en la delincuencia de la mano de Armando Valencia Cornelio “El Maradona”, del cártel de los Valencia.
Tras la muerte de Nacho Coronel y la detención de los líderes del Cártel de los Valencia, Oseguera Cervantes intentó apoderarse de la estructura de la organización, la secta quería a Elpidio Mojarro Ramírez alias “el pilo”, pero otro miembro Érick Valencia Salazar quería que Nemesio ocupara ese cargo.
Al interior del grupo se desató la guerra luego de que un bloque de los Valencia se negara a entregar a Gerardo Mendoza alias “El Tecato” ante “el Mencho” por el asesinato de un grupo de hombres que le proporcionaban información en Tecomán, Colima.
El grupo de los Valencia o del Milenio ya con el Mencho al frente, fundó el CJNG y no sólo consolidó su posición al frente del grupo criminal, sino que también lo hizo crecer de manera exponencial que pasó de ser solo un grupo pequeño a convertirse en uno de los grupos de delincuencia organizada más poderosos que actualmente opera en México.
Su ascenso dentro del mundo delictivo, se lo debe a su modus de traición frío y calculado a la hora de actuar.
Su formación paramilitar es considerada violenta tal, que durante su guerra contra un grupo armado “Los Zetas” halló buena práctica sanguinaria.
La aceleración en el crecimiento del CJNG, cuya presencia ocupa gran parte del territorio nacional, se debe en gran medida a la captura o abatimiento de grandes capos de la droga como la extradición de El Chapo Guzmán, el capo con más influencia hasta hace algunos años.
Homenaje musical
El nombre de Nemesio Oseguera “El Mencho”, volvió a resonar fuertemente luego de que el sábado 29 de marzo, durante un concierto musical ofrecido por Los Alegres del Barranco en Guadalajara, se le rindiera homenaje al interpretar “El del Palenque” un narcocorrido que hace referencia a los “logros” del narcotraficante fundador de las cuatro letras y de “sus gallos”, y paralelamente colocar su rostro en la pantalla colocada al fondo del escenario.
El hecho desató gran polémica pues la presentación tuvo lugar en el Auditorio Telmex de Jalisco, cuya administración del recinto emitió un comunicado para deslindarse de toda responsabilidad, alegando desconocimiento del programa musical y del material audiovisual que mostraría a la audiencia.

Tal fue su viralidad, que la propia presidenta Claudia Sheinbaum señaló durante una de sus conferencias matutinas, que “no debería de ocurrir eso…no esta bien” y pidió se realicen las investigaciones correspondientes a la par que invitó a los organizadores a verificar a quienes invitan a su eventos y cuál es el espectáculo que ofrecerán, pues aseguró que no es posible que se continúe haciendo apología del crimen.
Ubicación del rancho del horror
Un aspecto que ronda en la ironía, es que este auditorio dónde se efectuó la presentación, se encuentra a solo unos cuantos kilómetros de distancia del llamado Rancho del horror, atribuido al CJNG y su homenajeado “El Mencho”.
El Rancho Izaguirre fue descubierto por asociaciones de madres buscadoras a principios del mes de marzo y en él, fueron encontrados un sinfín de indicios entre calzado, ropa y demás pertenencias que podrían ser de personas desaparecidas en México.
Se trataba de un campo de entrenamiento criminal y de exterminio, para aquellos que se resisten al reclutamiento criminal, cuyo final era la muerte y posterior desaparición a través de los hornos crematorios clandestinos ubicados en varios puntos del perímetro.